A punto de explotar

Si hay algo de lo que se está hablando y mucho es de la situación en el Fc Barcelona, y es que cada vez parece menos sostenible y podría explotar en cualquier momento.

Ya se han producido varios roces y varias brocas en el vestuario, las más grave hasta ahora la del partido de Balaídos, dónde varios jugadores recriminaron a Quique Setién la mala gestión del partido y los cambios que hizo, cosa que sentó tremendamente mal al técnico cántabro.

A la situación interna se une los malos resultados del club durante estos últimos partidos, que hace que Quique Setién peligre en el puesto.

Ayer mismo hubo una reunión entre Quique y la directiva blaugrana en la que se lo comunicó al entrenador, según RAC 1, que confían plenamente en él, pero que no se descarta sustituirle si en el partido de esta noche contra el Átlético no hay resultados positivos.

Lo cierto es que existe un miedo real en la afición culé, de que esto explote y pueda haber daños muy graves.

Hay diferentes opiniones al respecto del por qué de esta ruptura. Unos dicen que es culpa de la directiva y el entrenador, que van en contra de los jugadores (esta opinión ha ganado fuerza en las últimas horas con el traspaso forzado de Arthur a las Juventus simplemente para que la directiva pudiera cuadrar cuentas) y que la gestión que se está heciendo es pésima y eso se traspasa al vestuario.

La segunda opinión al respecto, también muy popular es la de que no solo es culpa de la directiva y de los entrenadores, sino que la mayoría de la culpa recae sobre los jugadores, pero no todos los jugadores, sobre todo las “vacas sagradas” del vestuario blaugrana, que se piensan que son intocables.

Esta opinión surgió sobre todo a raíz de las imágenes publicadas por movistar plus, en las que se ve claramente como Messi, Suárez y Piqué no hacen caso a las indicaciones de Quique Setién y Eder Sarabia, pero no solo eso, si no que hacen gestos muy desafortunados.

Las imágenes son las siguientes:

Mi opinión al respecto de este tema es muy clara y sencilla: para que el Barça funcione, Messi tiene que estar feliz y ahora mismo no lo está, por eso mismo el Barça está jugando mal. Y si para que Messi esté un poco más feliz hay que echar a Setién, se le va a echar, no tengo ninguna duda. Pero el problema no terminará ahí, todos sabemos la mala relación de Messi con la directiva, acrecentada con la reciente venta de Arthur, al que calificó el mismo como el nuevo Xavi, por lo que hasta que la directiva actual no se vaya veo muy difícil que Messi vaya a jugar a su máximo nivel, y a su vez el Barça lo vaya a hacer.

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